Coaching consciente

Días atrás, en una de las charlas que suelo tener de Coaching con mi compañero Daniel Miskiewicz, miembro de la IAC 1, estábamos tratando la importancia de los Objetivos en esta materia. En el desarrollo de esta recordé una anécdota que me pareció un tema interesante de tratar en este artículo.

Muchas veces me encuentro con personas que me dicen “Muchos de los jugadores TOP en el deporte no se someten a ninguna sesión de Coaching y siguen siendo los mejores”, evidentemente no todos con las mismas palabras, pero si con la misma intención. Es entonces cuando les explico mi primera experiencia con el Coaching, al menos de forma inconsciente, para que puedan llegar a entender como funciona la cabeza de un atleta profesional con éxito y sin ayuda psicológica, esta dice así:

Cuando tenía 20 años, salí a jugar al fútbol fuera de mi hogar, concretamente en Castellón. Me encontré viviendo solo por primera vez, haciendo una pretemporada mucho más dura de lo que estaba acostumbrado, con compañeros que tenían 10 y 15 años más que yo y que llevaban en esto desde antes que tuviera uso de razón. No daba pie con bola, valga la redundancia en el mundo del fútbol. Estuve semanas y meses a un nivel muy por debajo del que estaba acostumbrado, lo cual me llevó a jugar muy poco en ese periodo. Es entonces cuando apareció la palabra mágica sin yo ser consciente: Coaching. Resulta que mi entrenador de porteros, después de verme todo ese tiempo perdido y sin saber qué hacer, se sentó conmigo y me hizo diseñar un plan de ruta. Marqué los objetivos, individuales y también grupales, que yo quería alcanzar, y qué pasos debía seguir pera avanzar hacia estos, desde muy corto plazo hasta final de temporada. Aclaré las posibles dificultades que podía ir encontrando y las virtudes que debía ir aprovechando.

Sin darme cuenta, y sin saber si mi entrenador Mikel Touzón 2 estaba formado en Coaching, hicimos una sesión en toda regla. Además, gracias al seguimiento diario que tenía conmigo, tuve una mejora exponencial y aprendí aplicarlo. Tal como comentaba hicimos coaching sin saberlo. ¿Por qué explico esto? Porque en el mundo profesional, nos podemos encontrar con gran variedad de casos, desde atletas que han conseguido grandes éxitos gracias a la psicología y coaching deportivo, o aquellos que en momentos puntuales han recibido algún tipo de ayuda. O bien, en el polo opuesto,
profesionales que cosechan grandes éxitos y que nunca han sido tratados. En estos casos, aunque ellos o ellas no sean conscientes, de forma innata desarrollan técnicas que las llevan a su mejor yo. Justamente fue ese mi caso, no por ser un jugador TOP, sino por aprovecharme inconscientemente del Coaching.

Muchas de estas técnicas, están recogidas dentro del mundo del coaching. Pero muchas otras son adaptadas a las circunstancias de cada profesional, por eso siempre decimos que cada caso es único y en consecuencia puede darse la oportunidad de escribir un nuevo epígrafe o capítulo en el “Mundo Coaching”.

En conclusión, podemos afirmar que hay muchos tipos de Coaching aplicables a muchísimas materias. En algunos casos, se usa a sabiendas de dicho proceso, pero muchas otras, las personas lo aprenden de forma inconsciente y muchas veces de forma autodidacta o innatamente. Pero siempre el Coaching, o al menos alguna de sus técnicas, está presente.